Este blog puede producir sobrecarga de felicidad.

martes, 27 de septiembre de 2011

Mirar no sirve de nada, no sirve para ver cosas bonitas.
No sirve para sentir o disfrutar. Simplemente no sirve.
Creo que aveces me engaño mirándote, pensando que alguna de esas sonrisas van para mí. Y sí.
No creo que me prestes atención, que me mires, que me vigiles, que me aprecies, que me apoyes, que me esperes, que me protejas y mucho menos que me quieras, para ti no soy nadie. Y sí.
Puede que tu y tus preciosos ojos no se den cuenta de que yo si los miro a ellos, continuamente. Y sí, continuamente.
Que cuando creo que me miras, no me miras, cuando creo que me guiñas un ojo, no lo guiñas, simplemente creo y tu no.
Cuando parpadeas, cuando bostezas, cuando miras, cuando hablas, cuando ríes, cuando sientes, cuando crees, cuando esperas, cuando escribes, cuando lees, cuando, crees que todo es un todo, o un hola, un adiós.Yo sí, te aprecio, yo si te siento, yo sí.




No hay comentarios:

Publicar un comentario